29 de enero de 2022

Peligros y engaños de la canalización


A mediados del siglo XIX una nueva locura mística invadió el mundo occidental. Se llamaba “espiritismo” y fomentaba la práctica de la “mediumnidad”, puesto que “médium" era el término utilizado por los espiritistas para designar a alguien que podía entrar en una condición o estado muy pasivo y receptivo para convertirse en “portavoz” o “vehículo” de manifestación de seres invisibles. Los espiritistas creían que dichas entidades que transmitían ciertos tipos de mensajes eran "almas" o "espíritus" de difuntos, utilizando con frecuencia esos términos de manera muy libre e indefinida, como mucha gente todavía lo hace en la actualidad. 

Las sesiones mediúmnicas y espiritistas comenzaron a celebrarse en casi todas las ciudades y pueblos de EE.UU., Reino Unido y gran parte de Europa. A menudo, los seres que hablan a través del médium pretenden ser espíritus de familiares o amigos fallecidos de los asistentes a la sesión (“séance”) o reunión, mientras que en otras ocasiones estos entes otorgan todo tipo de afirmaciones importantes sobre su identidad. Incluso Jesucristo -o más bien, los seres invisibles que se hacen llamar como tal- transmitieron mensajes que son por lo general de naturaleza altamente sentimental, antifilosófica, inmadura e incluso estúpida. 

Grandes figuras espirituales y de la historia mundial aparecen en sesiones de mediumnidad, desde Krishna Dvaipayana o Vyasa (el escritor hindú del Mahabharata y el Bhagavad Gita) hasta San Pedro, desde Buda hasta Napoleón, e inclusive George Washington. 

Los mencionados entes (que pronuncian discursos y mensajes a través de médiums) parecían completamente ignorantes hasta de los sucesos e información básicos que habrían conocido durante su vida terrenal; sus puntos de vista y mensajes sobre ciertos asuntos vitales eran en gran parte contradictorios a los que indica la historia y que se sostuvieron mientras estaban encarnados, y tomaban en muchos casos una naturaleza claramente occidentalizada o cristianizada (al igual que la condición e ideas de los propios médiums), pero estos hechos parecían no intimidar o confundir a los espiritistas quienes estaban tan abrumados con todas las afirmaciones sensacionales y mensajes que voluntariamente abandonaron sus facultades de raciocinio, sentido común y discernimiento

El hecho igualmente alarmante de que un "Jesús" hablaba a través de un canal humano en un recinto determinado, expresando opiniones y sentimientos muy diferentes al "Cristo" canalizado por otra persona en otro lugar y en la misma área, también fue frecuente y convenientemente ignorado por espiritistas, al igual que el trágico dato de que muchísimos médiums terminaban volviéndose locos, varios de ellos deviniendo alcohólicos y entregados a una vida de crimen y explotación e incluso suicidándose. 

Entra en escena una mujer de la nobleza rusa, Madame Helena Petrovna Blavatsky, que fue enviada a Estados Unidos por sus Maestros orientales en el Tíbet para fundar el Movimiento Teosófico, lo que se concretó en 1875. En las enseñanzas de Teosofía se explica la naturaleza real de tales mensajes y entidades, en los detalles minuciosos y complejos que tal asunto requiere. Los Maestros de H.P. Blavatsky, conocidos también como Maestros de Sabiduría, se opusieron inequívocamente al espiritismo y la mediumnidad, y previendo un destino calamitoso para Occidente si se permitía que esta "oleada" continuara sin interrupción, le dieron instrucciones para revelar la verdad detrás del fenómeno. 

01. Aparte de un número muy pequeño de excepciones, es IMPOSIBLE para el alma de un difunto comunicarse con aquéllos en la Tierra a través de un médium, o incluso ver o tener algún conocimiento de lo que está sucediendo "aquí abajo". Sin entrar en explicaciones metafísicas complejas, la verdad de esta afirmación puede verse fácilmente si consideramos lo siguiente: 

El lugar (o más bien estado) del Cielo es el paraíso de felicidad suprema y perfecta. Como tal, la lógica nos dice que allí no se puede experimentar pena o incluso el más leve dolor, pero si las almas de los fallecidos son capaces de "mirar hacia abajo" o "regresar en espíritu" y ver todo lo que sucede en la Tierra y especialmente en sus viejos hogares, ¿qué clase de bienaventuranza o “paraíso” puede ser? Por lo tanto, y de acuerdo con la doctrina de los espiritistas, ¡nosotros, seres humanos desafortunados, no nos liberamos de las penas de esta vida ni siquiera con la muerte! Imagínese a una madre fallecida mirando hacia la Tierra, visitando el entorno físico de manera invisible o sintonizándose automáticamente con su antigua familia durante días, semanas, meses y años después de su muerte, siendo testigo de las penas, sufrimientos o errores de seres queridos (sin poder hacer absolutamente nada), de quienes ahora está separada y a los que no puede ayudar, consolar o contactar. ¿Acaso esto puede ser una bendición? ¡Eso sería incluso más infernal que la vida en la Tierra!

Afortunadamente la Naturaleza tiene la amabilidad de crear un abismo infranqueable entre el estado del Cielo y el de la Tierra, de modo que aquéllos que han fallecido están completamente fuera del alcance de la existencia física y los individuos en el plano material. Una explicación más amplia de esto se da en “¿Qué ocurre cuando morimos?


02. El "pequeño número de excepciones" al que se aludió consiste principalmente en quienes se han suicidado y aquéllos cuya muerte ha sido de alguna manera resultado de accidente, violencia o asesinato. La víctima de suicidio permanece dentro de la atmósfera atractora de nuestra Tierra durante toda la duración restante de la vida que estaba destinada a experimentar. Por ejemplo, alguien que se suicida a la edad de 20 años, pero que estaba destinado por su Karma para vivir hasta los 90, debe pasar 70 años restantes en lo que algunos han llamado el "plano astral" antes de que puedan someterse al proceso completo de muerte y entrar en el estado del “cielo”. Las personas que se suicidan se encuentran igual de vivas a posterior, sólo que ahora se hallan aún más "atrapadas" que antes, y a menudo llenas de remordimientos y anhelos de volver a estar en contacto con la vida terrenal, es relativamente fácil para ellas iniciar contacto con un médium o que éste los busque. 

No obstante, esto es lo peor que puede hacer la víctima de suicidio, ya que reiniciar contacto con la vida de la que se ha privado intencionalmente es una transgresión espiritual. Los Maestros y H.P.B. enseñaron que, como resultado, el suicida que comete esta infracción pierde su alma para siempre, cuando llegue finalmente el término de su vida natural. Naturalmente, un destino oscuro también estará reservado para el médium que permitió que sucediera tal inobservancia, ya que habrán creado un Karma terrible para ellos mismos. 

Inicialmente, están reservados muchos estados diferentes para el alma cuya vida ha llegado a un final prematuro por accidente, violencia o asesinato, y el tipo de condición dependerá de la naturaleza interna del individuo. En una de las cartas escritas por el Maestro Kuthumi a los primeros teósofos, se explica a este respecto que los verdaderamente buenos y puros entran en un "estado de sueños agradables" por el resto de la duración de su vida natural y luego entran en el nivel celestial. Entretanto, la persona promedio -ni muy buena ni muy mala- puede o no ser atraída fácilmente por los médiums, pero de cualquier forma debe permanecer en Kama Loka (la atmósfera y atracción de nuestra Tierra, o el plano psíquico invisible que rodea el plano físico) hasta completarse la muerte natural. 

Las víctimas malas, inmorales y sensualistas de accidente, actos violentos o asesinato terminan vagando desesperados en Kama Loka hasta que llega el momento de la muerte natural y estos individuos se dejan seducir fácilmente por las oportunidades que ofrecen los médiums. En muchos casos se vuelven verdaderamente demoníacos en su comportamiento y abuso del canalizador y de los demás mediante dicho canal. También un destino verdaderamente terrible está reservado para tales entidades cuando acaece el término de su vida natural. 


03. Toda persona que muere deja tras de sí lo que se puede llamar un "caparazón astral", que es el remanente de sus partes menos espirituales o más mundanas y sensuales durante la vida recién terminada, y estas características particulares naturalmente son inadecuadas y se quedan fuera del estado celestial que la Teosofía llama Devachan. Este caparazón no es el alma individual real, sino simplemente una forma subjetiva inconsciente que al final se desintegra, por lo general en unas pocas décadas como máximo. Dicho remanente astral contiene una gran porción de recuerdos y conocimientos que el individuo poseía durante esa vida, pero esos restos se descartan y desvanecen gradualmente, sin que haya ninguna conciencia individual y real tras ellos, ya que el alma habrá entrado en Devachan y estará más allá el alcance de cualquier persona en el plano físico. 

Estas coberturas astrales o kama-rupas deambulan sin sentido en Kama Loka y son fácilmente contactadas por aquéllos con tendencias mediumnísticas o sensibilidad psíquica. Dado que son capaces de repetir y recitar sin sentido ciertos datos y conocimientos que el individuo poseía durante su vida en la Tierra, muchos los confunden fácilmente con la “verdadera” alma del difunto. De esta forma, son estas coberturas astrales o kama-rupas los que comprenden la mayoría de las entidades contactadas por los médiums y que aparecen en las reuniones espiritistas.
 

04. Los Maestros enseñaron que todos los seres genuinamente elevados y espiritualmente puros -incluidos los mismos Mahatmas- tienen "prohibido" (por "leyes sabias e intransigibles") ser canalizados a través de médiums y jamás se les permite hacerlo. También se señaló que "semejante sólo atrae semejante" y que la Ley de Atracción y Repulsión siempre está en funcionamiento. Esto significa que un médium nunca puede atraer o convertirse en conducto de entidades que pertenecen a una naturaleza significativamente más alta o espiritual que él/ella mismo (a), sino sólo aquéllas de condición similar o inferior

Por lo tanto, se puede ver que es estúpido e incluso peligroso aplicar ingenuamente explicaciones simplistas y positivas para mensajes y fenómenos mediúmnicos. El asunto es mucho más complejo y oscuro de lo que mucha gente piensa, y a la luz de estos detalles los Maestros Morya y Koot Hoomi (los dos Adeptos principales detrás de H.P. Blavatsky y la fundación de la Sociedad Teosófica) declararon “oponerse fuertemente al espiritismo y la mediumnidad" y la describieron como "la más loca y fatal de las supersticiones". 

Hemos establecido todo esto para señalar que la locura moderna de la “CANALIZACIÓN” no es otra cosa que “MEDIUMNIDAD” bajo un nuevo nombre

De hecho, "médium" y "canal" son sinónimos, que literalmente significan “algo/alguien que permite que algo/alguien más fluya a través de él”. El movimiento de la Nueva Era pone gran énfasis e importancia en la canalización y los mensajes recibidos, y basta con una breve visita a YouTube o realizar búsquedas en Google para encontrar una gran cantidad de comunicaciones de esa clase, al tiempo que todas ellas pretenden provenir de "seres espirituales" de gran "poder" e "influencia". Miles de personas en todo el mundo creen ser canales para los "últimos mensajes" del Señor Buda, Jesucristo, Krishna, la Virgen María, el Arcángel Miguel u otros Arcángeles y Ángeles, seres supremos alienígenas o reinas y princesas extraterrestres, difuntos maestros espirituales de tiempos recientes, y particularmente de los llamados "Maestros Ascendidos", algunos de los cuales llevan los mismos nombres de Mahatmas vivientes y físicamente encarnados con quienes H.P.B. estaba asociada. 

Efectivamente, en nuestros días el término "Maestro Ascendido" es probablemente la palabra de moda más popular en el movimiento de la Nueva Era. En otro artículo establecimos lo siguiente: 

“Actualmente, casi todas las veces que se mencionan los nombres Morya o Kuthumi, están relacionados con la idea de los 'Maestros Ascendidos' y se afirma que estos dos y muchos otros en realidad no están físicamente en nuestro planeta, sino que moran en reinos espirituales sobre la Tierra y en cuerpos espirituales, casi como semidioses... una noción que es refutada una y otra vez por sus propias palabras en cartas publicadas, ¡que incluso incluyen referencias al Maestro Morya teniendo que cocinar su cena y al Maestro Kuthumi que se siente exhausto después de un largo viaje a caballo! 

Puede ser útil tomar conciencia sobre los orígenes de la idea de los 'Maestros Ascendidos'... 

En la década de 1930, un hombre estadounidense llamado Guy Ballard -famoso estafador y hombre de negocios- publicó una serie de libros que describían experiencias y encuentros dramáticos que se supone tuvo con 'Maestros Ascendidos' (fue él quien acuñó este término), principalmente 'Saint Germain', de quien se dijo haberle revelado las 'leyes cósmicas garantizadas para la manifestación de riqueza'. Ballard ciertamente logró adquirir riqueza para él y su familia, la cual Saint Germain habría declarado que era la más elevada e importante del planeta y sus integrantes los únicos y genuinos mensajeros de Dios, y es así que esta prosperidad la amasó por diversos medios de explotación de las gentes crédulas que confiaban en sus historias infantiles. De hecho, escapó por poco de ir a prisión, una vez que los detalles de sus planes salieron a la luz, y un libro escrito en su momento por un ciudadano estadounidense preocupado por este grupo (conocido como el "Movimiento Yo Soy"), lo describió como 'la dictadura psíquica de Estados Unidos'. 

Tomando los nombres e identidades básicas de los Maestros implicados con la Sociedad Teosófica y su trabajo como base para inventar desde cero a muchos otros, Ballard y sus sucesores en los movimientos en expansión de 'Maestros Ascendidos' -tales como Geraldine Innocente (Bridge To Freedom) y más notablemente, Mark y Elizabeth Clare Prophet (The Summit Lighthouse/Church Universal and Triumphant)- los convirtieron en figuras divinas infalibles y omnipotentes, que supuestamente residían en los reinos celestiales, felices y prestos para entrar en contacto con alguien que les rezara y tuviera la disposición, y anhelando derramar incalculables bendiciones de riqueza, salud y felicidad sobre todos quienes los invocaran. Según Ballard, los 'Maestros Ascendidos' también requerían que cualquiera que deseara tales bendiciones regularmente donara tanto dinero como fuera posible al 'Movimiento Yo Soy'. 

A la luz de los desagradables orígenes sobre el concepto de 'Maestros Ascendidos', el individuo discerniente debe concluir que cualquier persona -repetimos, cualquiera- que afirme haber estado en contacto con Maestros Ascendidos y que se correspondan con las descripciones dadas por Ballard, Prophet u otros "Mensajeros designados" autoproclamados o inconscientemente, está siendo engañada y desorientada (como suele ser el caso) o es intencionalmente mentirosa

No sólo las enseñanzas y los mensajes otorgados por estos 'Maestros' nunca concuerdan con las comunicaciones de otros canales que también pretenden contactar a los mismos seres, sino que en todos los casos son radicalmente diferentes y contradictorios a las enseñanzas reales expuestas por los Maestros genuinos en sus propios escritos. Los investigadores y escritores que han estudiado el contenido de las Cartas Mahatma desde una perspectiva académica han concluido que los Maestros son claramente budistas; tal es la fuerte naturaleza mística y el contenido de esa correspondencia, sin mencionar el hecho de que los Maestros estaban afiliados con el Monasterio Tashilhunpo (Shigatse, Tíbet). Si vamos a creer la absurda afirmación de que estos Maestros ahora están 'ascendidos' y viven, enseñan y trabajan en y desde reinos celestiales como quieren que aceptemos los seguidores de estos 'seres especiales' (generalmente identificados como “ascensionistas” o “trabajadores de la luz”), entonces también se requiere que creamos que los Maestros se han vuelto asombrosamente menos inteligentes y tienen una menor mente filosófica, que han olvidado el 95% de sus enseñanzas originales y ahora eligen propagar una extraña forma de galimatías cuasicristiano de la Nueva Era. ¡Es entonces cuando desisten en sus persuasiones para que creamos que los Maestros ahora vuelan alrededor del Universo en naves espaciales y realizan visitas frecuentes y amistosas a reinas alienígenas en la galaxia de Andrómeda!” 

En la década de 1980 un maestro espiritual de Arizona organizó un experimento -o más bien una exposición- para demostrar la verdadera esencia de la canalización y su total falta de fiabilidad, engaño inherente, necedad e ilusión. 

Un día domingo invitó a tres médiums para dar mensajes canalizados y enseñanzas en su centro espiritual. Estas tres personas, que nunca se habían visto antes, afirmaron y creyeron sinceramente que eran canales para la misma entidad. El profesor hizo entonces que los tres se turnaran para subir a una plataforma y entregar un mensaje obtenido por mediumnidad, seguido de una canalización de respuestas a preguntas por asistentes. Los canales humanos se mantuvieron separados tras el escenario y cada uno desconocía la naturaleza y el contenido de lo que el otro había señalado desde su "fuente común". Después que la tercera persona había completado su acto, los dos canalizadores restantes fueron llevados al escenario para unirse a aquélla. Habían sido tan ingenuos y crédulos como la mayoría de los espiritistas, que se conmovieron profundamente al saber que cada uno había entregado un contenido totalmente contradictorio a los otros, y que la supuesta “entidad idéntica” que contactaron expresó puntos de vista muy diferentes sobre numerosos asuntos, a pesar que los médiums recordaban a la audiencia lo “grande” y “poderoso” que era el ser en cuestión. De hecho, esta afirmación de “supremacía espiritual” completamente improbable e indemostrable era la única similitud real entre las tres canalizaciones

Los médiums se retiraron en consternación, confusión y cuestionamiento mutuos y desde ese momento comenzaron a darse cuenta de cuán estúpido es creer ciegamente en las afirmaciones de una entidad invisible y someterse a ella. 

Sin embargo y desafortunadamente, la gran mayoría de la gente nunca se detiene a cuestionar tales aspectos y tampoco usa sus mentes en absoluto respecto de asuntos tan importantes. Los “manuales” que alientan a sus lectores a canalizar y que explican cómo hacerlo son algunos de los más populares en el género de la Nueva Era, al igual que los textos que contienen mensajes y enseñanzas impartidas a través de ese proceso. Del mismo modo que el movimiento espiritista falló ostensiblemente al no producir nada en el sentido de una profunda enseñanza espiritual, filosofías elevadas, revelaciones confiables o hechos precisos, también ha fallado el movimiento mediúmnico al interior de la Nueva Era. 

Lo que realmente ha producido es una masa de: 

(a) Mensajes simplistas y sentimentales que, aunque pretendan provenir de algunos de los seres espirituales más elevados y poderosos del Universo, son frecuentemente más ridículos e infantiles y están más pobremente expresados que lo que podría decir un niño de 5 años. 

(b) Anuncios sensacionalistas, pronunciamientos y pseudorevelaciones, ninguno de los cuales se ha demostrado que se haya cumplido alguna vez. Los mensajes canalizados a menudo resultan irremediablemente incorrectos, como las multitudes de profecías de "desastre inminente" que han surgido en muchas sesiones durante las últimas décadas, y la increíble cantidad de afirmaciones erróneas sobre lo que le sucedería al mundo y a la humanidad en el tan manoseado año 2012. Cuando ninguna de estas profecías se concretó, los canales aseguraron a sus seguidores que habían sucedido en realidad "exactamente como dijeron", pero que habían tenido lugar "en un nivel espiritual invisible"... una excusa probada a lo largo del tiempo y utilizada a través de la historia por estafadores y charlatanes de todas las clases. Paradojalmente, las entidades que hablan a través de los canalizadores también fallan una y otra vez en predecir hechos serios e importantes que de hecho suceden en el mundo

(c) Palabras en boga sin sentido (más adecuadas para el ámbito de las novelas de ciencia ficción), frases clave y teorías pseudocientíficas como los "Maestros Ascendidos", las "terapias angelicales", "Federación Galáctica de la Luz", "código de activación de ADN", “liberación cristalina de la Matriz Esmeralda”, "ascensión planetaria", "despertar del 11:11", "armonización/sintonización arcangélica", "semillas estelares", "Comando Ashtar", "ángeles terrestres", "síntomas de ascensión", "Buda del Rayo Rubí", y así sucesivamente ad infinitum

(d) Enseñanzas y prácticas egocéntricas que glorifican la materialidad y animan a todos a enriquecerse, triunfar y manifestar todas sus ansias financieras, físicas, emocionales, materiales e incluso sexuales, mediante el uso de las tan llamadas técnicas de la "Ley de atracción". Los canalizadores nos harían creer que incluso Buda, cuyo mensaje y enseñanza eran claramente antagónicos al deseo y que repetidamente enfatizó que aquél "es la causa de todo sufrimiento", ¡ahora está dedicando su tiempo a instar a los fanáticos de la mediumnidad para visualizar su camino hacia un estilo de vida millonario! Tales enseñanzas y prácticas no son más que magia negra en el verdadero sentido del término y siempre han sido denunciadas y condenadas como tales a lo largo de la historia. El hecho de que estas "leyes de atracción" y las enseñanzas para concretar deseos tengan su mayor atractivo y audiencia aquí en Occidente, y que a la vez tengan muy poca aceptación por los orientales de mayor inclinación espiritual, muestra inequívocamente el grado de la pobreza interior en mucha gente. 

(e) Fanáticos de las canalizaciones: personas que a menudo terminan considerando la mediumnidad como toda la esencia y el objetivo de la espiritualidad y que no sólo toman en serio los mensajes canalizados, sino que además en muchos casos creen incuestionablemente que son “más o menos infalibles”. Hay quienes les resulta difícil pasar el día sin escuchar la última canalización de YouTube de “Kwan Yin”, “Lady Nada” o el “Sagrado Guardián de Sirius” y otros que sienten que su jornada está incompleta si no reciben un mensaje de su supuesto "Ángel guía". 

Una mujer a la que llamaremos G. era ávida oyente y lectora de canalizaciones. Un día, mientras meditaba, oyó una voz diciéndole que un grupo de ángeles deseaba usarla como canal. Asegurándole que no debía temer nada y que su supervisor directo era el propio “arcángel Gabriel”, la entidad le pidió que sometiera sus facultades mentales y espirituales a estos seres y, sin dudar de la validez o autenticidad de las afirmaciones por un momento, y sin haber leído ni escuchado nada que advirtiera contra la canalización, ella cumplió alegre e inmediatamente. Durante los días siguientes G. recibió instrucciones para escribir varios y largos mensajes que la entidad canalizó a través de ella, pero la médium descubrió que su tono y contenido se volvían cada vez más inquietantes y que los mensajes exhibían una serie de profecías muy graves y sensacionales sobre la futuro de la humanidad. En la siguiente ocasión que este ser desconocido deseaba que G. lo contactara, ella declinó la instancia y lo ignoró, y esa misma noche tuvo las pesadillas más horrendas, despertándose con la sensación de que muchos pequeños insectos se arrastraban por todo el cuerpo y la devoraban. Al día siguiente la entidad se volvió más enérgica en sus órdenes y G. le dijo que había cambiado de opinión y que ya no sería medio para quien o lo que fuera. Esto enfureció al ser en cuestión, causando que la mujer se viera afectada de tal manera que intentó arrojarse desde el balcón de su departamento, y en la actualidad está internada en un hospital psiquiátrico seguro. 

Este trágico caso de G. es también la historia de muchos otros individuos que, careciendo de la facultad vitalmente importante de discernimiento y discriminación, han caído en la trampa perniciosa de la mediumnidad. A la luz de lo que enseñaron los Maestros y H.P.B. podemos concluir con seguridad que los mensajes canalizados provienen de: 

-La propia imaginación del médium, ya sea que no se dé cuenta de ello o percatándose perfectamente, ya que hay muchos canalizadores que no son más que estafadores que buscan aprovecharse de personas crédulas. 

-Personas fallecidas cuya muerte fue provocada por suicidio, accidente o asesinato y que, por lo tanto, están atrapados en Kama Loka. Si durante su vida anterior tuvieron intereses espirituales, religiosos o metafísicos en particular, pueden sentirse inclinados a tratar de promulgarlos en la Tierra a través de un medio/canal. Sus enseñanzas e ideologías pueden estar completamente equivocadas, pero, naturalmente, estos "psíquicos" creen que son correctas. Muchas veces, tales entidades excarnadas hablan con un aire de autoridad contundente, adoptan nombres altisonantes o de personajes importantes para que la gente en el plano físico preste más atención y credibilidad a lo que tienen que decir. Por lo tanto, el hipotético "Ra-Ra-Om de las Pléyades" con todas sus teorías de "astro-chakras electromagnéticos" puede ser en realidad John Jones, muerto en Los Angeles, quien busca que la gente ponga atención a las diversas teorías que tuvo durante su vida terrena y que le fue arrebatada hace 30 años cuando unos delincuentes lo mataron en su casa. Otros humanos fallecidos atrapados en Kama Loka (que podemos llamar el “plano astral”) pueden simplemente querer engañar y desorientar a personas en la Tierra y causar daños. También es plausible que cualquiera de estos tipos utilice su médium para satisfacer ciertos deseos y apetitos que no lograrían calmar de otra manera, como en el caso de un famoso canal femenino y ahora fallecido que a menudo se dejaba poseer por el impulso incontrolable de fumar, beber alcohol y comer ciertos tipos de carne cada vez que canalizaba a una entidad particular, con quien se había contactado en la primera ocasión a través de una sesión con la tabla “ouija”. 

-Cascarones astrales o kama-rupas (mencionados anteriormente) capaces de recitar y repetir inconscientemente ciertos extractos de información y conocimiento, pero que en realidad son coberturas sin alma en descomposición. Los incautos pueden confundirlos fácilmente con seres individuales reales... y si alguien tiene una ambición específica de convertirse en canal del arcángel Rafael, por ejemplo, puede engañarse y pensar que los kama-rupa (con quienes han logrado hacer contacto) de hecho son ese “ser divino”. La ambición y el deseo descontrolado son grandes trampas no sólo en este ámbito, sino en todas las áreas de la vida. 

-Seres elementales, como ciertas clases de espíritus de la Naturaleza que pueden “divertirse” al animar y vitalizar formas de pensamiento en los canalizadores y simular así que los “Maestros Ascendidos” o arcángeles (en los que cree y ha estado pensando) se están comunicando con y a través de él/ella. 

-Seres humanos malvados, posiblemente pertenecientes a lo que se ha llamado Hermandad Oscura o Logia Negra, cuya intención es simplemente destruir la utilidad y el beneficio potencial que las personas místicas pueden traer al mundo al desorientar y desviar la atención de las masas desde las sólidas verdades espirituales hacia los reinos caóticos de pura fantasía y ficción. ¡Tales seres usarán a cualquiera que puedan y especialmente a víctimas voluntarias para cumplir sus objetivos, y no tendrán reparos en hacerse pasar como santos Maestros, Arcángeles o incluso como el mismo Buda!* 

*En este sentido, no nos extrañaría que haya desinformación, es decir, que ciertos grupos vinculados a la Logia Negra tomen ciertas enseñanzas espirituales útiles y profundas haciéndolas “coincidir” a través de canalizaciones con los fundamentos teosóficos originales para perjudicar al Movimiento homónimo (N. del T.).

[Notas complementarias


-Caso del matrimonio Batzel (New Jersey, EE.UU.) donde la familia comenzó a padecer acosos de una entidad invisible luego de ser canalizada en una sesión espiritista cuando los fenómenos se manifestaron por primera vez. A partir de ese momento los Batzel se mudaron 11 veces y los ataques continuaron sin cesar (desde 16:35 hasta 31:58; incluye la opinión de pseudoescépticos)].

¿Por qué tanta gente “espiritual” tiene tanta aversión a la Sabiduría Antigua y Eterna? ¿Por qué tantos escuchan con entusiasmo y emoción las palabras espurias canalizadas y atribuidas a Buda o Krishna, pero no expresan ningún interés en leer el Dhammapada o el Bhagavad Gita, donde pueden encontrar las verdades sublimes, profundas y eternas que los genuinos Buda y Krishna realmente enseñaron? Si los interesados en este tema realmente mostraran honor y respeto por los Maestros, ¿por qué se abstienen deliberadamente de leer y estudiar sus enseñanzas originales y dadas al mundo a través de H.P. Blavatsky, y en su lugar sólo leen o escuchan palabras canalizadas de algunas entidades desconocidas que dicen “ser” Maestros, cuyos mensajes y "doctrinas" invariablemente parecen producto de un bebé balbuceante comparado con las obras que co-escribieron con H.P.B., más exactamente "La Doctrina Secreta"? 

Si alguien quiere saber qué es lo que el Maestro K.H. afirma sobre algún tópico, ¿por qué recurre a la masa de aserciones siempre contradictorias e infantiles hechas por una colección de pseudo-Koot Hoomis canalizados, cuando puede acudir a las palabras reales del original, real, y único K.H., un humano vivo que declaró categóricamente que “nunca puede ser canalizado” y “nunca lo será” por nadie?

¿Por qué tantas personas “espirituales” nunca piensan alguna vez en investigar los orígenes de diferentes enseñanzas, ideas y prácticas para que puedan descubrir la verdadera esencia y legitimidad de las cosas? Y más concretamente, ¿por qué los individuos que de otro modo pueden ser muy inteligentes, sensatos y educados, son además tan crédulos e ingenuos para creer a ciegas la basura producida diariamente por los canalizadores del mundo? Tal vez la respuesta es que hoy por hoy existe una epidemia masiva de inercia mental que infesta al mundo, una aversión general al PENSAMIENTO, una confusión común de lo psíquico por lo espiritual y una sed de fantasía más que de realidad. El Maestro K.H. declara en una carta que aquéllos que deseen realizar un verdadero progreso espiritual deben pasar de su "tierra de sueño y ficción" a "nuestra tierra Verdadera de realidades y hechos severos", y también afirmó en otra parte que “el 99% de todas las supuestas comunicaciones espirituales son falsas”, es decir, no son lo que parecen. 

En su artículo de 1993 para el boletín "Aquarius", titulado "Channelling and Ascension in the Light of Theosophy", el prominente teósofo británico Geoffrey Farthing (1909-2004) escribió lo siguiente: 

"Debemos preguntarnos seriamente: ¿puede ser factible lo que dicen los canalizadores? También es necesario tener en cuenta la naturaleza sospechosa de las transmisiones canalizadas. En algún lugar los Maestros nos dieron una señal que, según dijeron, sería incluida en cualquier mensaje genuino recibido de ellos, y esto se hizo necesario porque, incluso durante la vida de H.P.B., fueron transmitidos muchos recados espurios de los Maestros. ¿Acaso no podríamos pedir razonablemente que los canalizadores nos den esta señal si realmente están en contacto con Ellos que la conocen y la dieron específicamente para evitar avisos falsos en su nombre

Aquellos miembros de la Sociedad Teosófica que se han tomado la molestia de consultar la gran literatura original en que se promulgaron las enseñanzas teosóficas, tienen un conocimiento previo que se valida por el hecho de que no sólo se ajustan a todos los aspectos de su experiencia, sino que también dan una medida para evaluar la verdad o fraude de otras enseñanzas. La Teosofía es como la Kabala, de la cual se dice que si una declaración o doctrina no encaja en el 'Árbol de la Vida', no puede ser verdad. ¿No deberían otros también (que aún no han analizado lo que se nos otorgó) hacer primero esa indagatoria antes de aceptar lo que ahora se describe como 'nuevas y emocionantes ideas'? ¿Por qué no hacer un trabajo honesto para descubrir la viabilidad de esas ideas antes de quedar irremediablemente enredado en ellas?” 

Uno de los principales objetivos originales del Movimiento Teosófico era generar, en la medida de lo posible, un despertar espiritual e intelectual de la humanidad y proporcionarle una enseñanza espiritual profunda, detallada, sólida y filosófica para no ser atraída por influencias psíquicas desagradables ni caer en su trampa (tales como la canalización, supuestas comunicaciones angélicas, etc.) que los Maestros y H.P.B. advirtieron serían lanzadas al mundo en el siglo XX. 

El hecho concreto de que H.P.B. y los Maestros conocían lo que iba a suceder con respecto a la mediumnidad y la “ángelmanía" de hoy, al advertir específicamente sobre ello como un evento inminente y al hacer todo lo posible para sembrar conocimiento en una dirección totalmente distinta, seguramente demostrará que sabían exactamente de lo que hablaban y que pueden ser tomados con mucha más seriedad y confiabilidad que los canalizadores y las entidades que contactan. 

Los médiums y sus mensajes pueden anunciar y presagiar el advenimiento de la Nueva Era en repetidas ocasiones, pero la verdad es que la superstición, la ignorancia, el engaño y el espiritismo que reproducen a diario obstaculizan el nacimiento de una Edad Nueva para la humanidad más que cualquier otro fenómeno. "¡Despierta, tú que duermes!

"Los espiritistas que creen en las comunicaciones con los espíritus incorpóreos, y que éstos pueden manifestarse a través de personas, o impresionar a los susceptibles para transmitir 'mensajes', consideran a la mediumnidad como una bendición y un gran privilegio. Por otro lado, los teósofos que no creemos en la 'comunión de espíritus' como hacen aquéllos, consideramos ese 'regalo' como una de las enfermedades nerviosas más peligrosas y anormales (…) el atisbo y audición de lo que, si se contemplara en su verdadera naturaleza, habrían llenado de horror el corazón frío del médium, ahora lo colma de una sensación de beatitud y confianza. Él realmente cree que las vistas inmensurables que se le muestran son el verdadero mundo espiritual (…) Sostenemos que en general la mediumnidad es más peligrosa, y las experiencias psíquicas, cuando son aceptadas indiscriminadamente, conducen sólo a mentir honestamente a los demás, porque el médium es la primera víctima que se engaña a sí misma" 
(H.P. Blavatsky, "Psychic and Noetic Action"). 

Recomendamos un libro recientemente publicado por Joscelyn Godwin, titulado "Atlantis and the Cycles of Time: Prophecies, Traditions, and Occult Revelations", que entre otros temas proporciona una historia completa sobre el movimiento de canalización en la "espiritualidad" Nueva Era.