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1 de febrero de 2022

¿Necesitan reescribirse los libros de Blavatsky?


¿Qué tan confiable es la serie "Collected Writings" por Boris de Zirkoff?

"Este trabajo se escribió para instrucción de estudiantes de ocultismo, y no para beneficio de los filólogos
(H.P. Blavatsky, "La Doctrina Secreta", vol. 1, p. 23).

Ocasionalmente algunos estudiantes de Teosofía sostienen que "los escritos de H.P. Blavatsky deben reescribirse" por dos razones principales:

(1) Simplificar y modernizar el lenguaje, la expresión y estructura, de modo que los libros teosóficos más importantes se hagan más contemporáneos, populares y atractivos para la mentalidad del siglo XXI, aunque sin alterar las enseñanzas reales impartidas.

(2) Hacer que las obras teosóficas relevantes sean tratadas con seriedad y respeto por académicos e intelectuales modernos y que prefieren las transliteraciones uniformes, estandarizadas y actuales de sánscrito, tibetano y otros términos, y quienes usualmente no aceptan con agrado faltas de ortografía, equívocos gramaticales, citas incorrectas, atribuciones erróneas o inexactitudes ocasionales y reales de naturaleza mundana, todo lo cual ocurre muy ocasionalmente en los escritos de H.P.B., ya que no era infalible como recordó a sus lectores.

En la serie "H.P. Blavatsky Collected Writings", Boris de Zirkoff intentó implementar el segundo punto, actuando como editor de todo lo escrito por aquélla.

En un comentario al artículo "¿Cómo estudiar 'La Doctrina Secreta'?: guía para principiantes" dijimos:

En su "Prólogo Editorial" para la edición de "Collected Writings" sobre "La Doctrina Secreta", Zirkoff reconoce que realizó alteraciones en el texto de H.P.B. que van desde cambiar palabras, puntuación, ortografía, agregar términos, modificar citas, añadir referencias a autores que cita la escritora y rediseñar diagramas, agregando muchas fotos e imágenes de personas o lugares mencionados en el texto y también incluyendo sus propios comentarios y críticas en un Apéndice editorial al final de cada volumen.

De este modo se puede comparar la página 1 en la edición de Zirkoff con la primera plana de la versión por H.P.B. (que está publicada sólo por Theosophy Company y Theosophical University Press) y encontramos nada menos que ocho cambios en un único folio. No tenemos el tiempo para comparar cada página de ambos, pero si se pueden realizar ocho modificaciones en una plana, entonces ¿cuántas más debe haber en los dos volúmenes completos?

Este es un aspecto que los estudiantes de enseñanzas teosóficas originales han tenido en cuenta desde hace bastante tiempo. Véanse al respecto las publicaciones antiguas en el foro: 

http://theos-talk.com/archives/200105/tt00144.html,
http://theos-talk.com/archives/200105/tt00152.html
http://theos-talk.com/archives/200105/tt00123.html y
http://theos-talk.com/archives/200307/tt00195.html,

sólo por mencionar algunos ejemplos sobre cómo Zirkoff reescribió completamente algunas de las oraciones de Blavatsky al borrar o agregar conceptos y cambiando significados, generalmente sin identificarlo en específico como tal y dejando al lector no informado sin la opción de saber que lo que está leyendo no es la forma en que H.P.B. lo escribió, sino una distorsión moderna.

En el último enlace provisto anteriormente, un comentarista señaló: "Siempre me sentí muy incómodo con las notas al pie por Boris de Zirkoff en los C.W. ["Collected Writings Series"] y fue un motivo de gran dolor para mí el tono arrogante con el que se puso por encima de Blavatsky, señalando en cada ocasión posible que ella "estaba inventando a medias" una versión de texto desde alguna fuente original antigua u oscura, que estaba "citando de manera imprecisa" o insinuando que era "dudoso que lo que H.P.B. declaraba como fuente existió alguna vez en esa forma", y nunca pude entenderlo. Seguí preguntándome por qué alguien pensaría saber más que H.P.B., y por qué especialmente Zirkoff haría eso, el último pariente vivo de aquélla. Habría sido inconcebible para mí que él tuviese la audacia de continuar y modificar en la práctica lo que ella escribió".

Tony Maddock, un teósofo inglés que según tenemos entendido es miembro de la Sociedad Teosófica Adyar, señaló en otro foro publicado hace 20 años (http://theos-talk.com/archives/199903/tt00024.html) que uno de los artículos compuestos por Blavatsky, en particular "Reincarnations in Tibet", fue sometido a más de 100 alteraciones por parte de Zirkoff cuando lo preparó para su reedición de "Collected Writings".

Maddock comparó la versión de "Collected Writings" con el artículo original publicado por H.P.B. en "The Theosophist" y la difundida por Theosophy Company (editores de la L.U.T.) en su volumen triple de "H.P. Blavatsky Theosophical Articles" (165 de sus escritos más relevantes) y encontró que la edición por ésta última entidad no tenía alteraciones del original y que, como ya mencionamos, la de Zirkoff presentaba más de un centenar. Maddock comentó:

"Se valora que algunos prefieran las alteraciones por motivos de academicismo, queriendo ser visto como persona respetable, etc. Desde el punto de vista de 'eminente en santidad, como un Buda, espiritual (...) la tierra santa y mística', las 100 extrañas alteraciones hechas en este artículo particular son muy físicas. Algunos preferimos leer esta composición como Blavatsky la concebió (con su perspicacia espiritual) (...) La ortografía en 'Reincarnations in Tibet' (...) no son uniformes en al menos un caso, y generalmente en los escritos de H.P.B. se puede decir que las grafías tampoco son homogéneas. En la versión alterada se estandarizan e intenta hacer que sea lógico mediante el método de la letra muerta sin alma y que no tiene en cuenta los elementos más sutiles o espirituales. Eso niega al lector moderno palabras como Lha-ssa porque ahora sólo puede verse como la capital de Tíbet (Lhasa), una ubicación geográfica (...) ¿Debemos cambiar los escritos de Blavatsky para mantener contentos a los expertos y 'budistas' serios, etc., para que sus composiciones sean admisibles en ciertos círculos llamados 'eruditos', con objeto que ella sea aceptada seriamente y no como charlatana por los ciegos? Si a ella le hubiera importado este tipo de trivialidad, difícilmente habría llamado a su revista 'Lucifer' a fines del siglo pasado (...) lo menos que podemos hacer es transmitir los escritos originales de H.P.B. para las generaciones futuras, y como teósofos no deberíamos comprometer a la autora".

Sin embargo, Zirkoff y otros sostienen que no la "comprometen", sino la "ayudan", ya que seguramente querría que se corrigiera incluso la más mínima imprecisión en sus trabajos; pero ya que Blavatsky no está entre nosotros para supervisarlos, ¿acaso no es en última instancia un negocio arriesgado y presuntuoso intentar hacerlo en su lugar?

Después de todo, H.P.B. no era alguna clase de profesora universitaria, pero realizó su labor de escritura como ocultista iniciada cuyos libros y artículos se escribieron muy a menudo bajo la inspiración de algunos Maestros de Sabiduría -sus Instructores Adeptos- y en algunos casos incluso dictados telepáticamente por estos individuos. Los Mahatmas K.H. y M. declararon repetidamente en sus Cartas que "La Doctrina Secreta" es la "triple producción" de Ellos mismos con su "Agente Directo"; para más detalles véase "¿Quién escribió 'La Doctrina Secreta'?".

En su último artículo titulado "My Books", Blavatsky afirma: “Y lo que sostengo es lo siguiente: exceptuando las citas directas y los muchos errores de impresión, equívocos y citas incorrectas antes especificados, y la composición general de Isis Develada, de los que no soy responsable, (a) cada palabra de información encontrada en este trabajo o en mis escritos posteriores proviene de las enseñanzas de nuestros Maestros orientales, y (b) muchos pasajes en estas obras han sido escritos por mí bajo Su dictado. Al decir esto no existe un afán de reclamación sobrenatural, ya que por tal dictado no se realiza milagro alguno (...) El espacio y la distancia no existen para el pensamiento, pues si dos personas están en perfecto entendimiento psicomagnético mutuo -y si de ambos uno es un gran Adepto en Ciencias Ocultas-, entonces la transferencia de pensamientos y dictado de páginas enteras se vuelven tan fáciles y comprensibles a una distancia de dieciséis mil kilómetros como el intercambio de dos palabras en una habitación".

También existe la cuestión sobre la presencia de un "cifrado astral" en muchos de los escritos teosóficos originales, en particular los de H.P.B. -y también en el caso de William Judge, su colega más cercano y compañero Iniciado-, como una razón importante por la que esos textos originales no se vean alterados, resumidos, "revisados", etc. En “Luz en el Sendero” (p. 29-30, 33) tenemos lo siguiente:

“Hay otra forma de leer que de hecho es la única que muchos autores no utilizan. Se trata de leer no entre líneas, sino al interior de las palabras; en efecto, es descifrar un código profundo. Todas las obras alquímicas están escritas en la clave que menciono y ha sido empleada por grandes filósofos y poetas de todos los tiempos. Es usado sistemáticamente por adeptos en la vida y el conocimiento, quienes al dar en apariencia su más profunda sabiduría esconden su verdadero misterio en las mismas palabras que lo enmarcan, y no pueden hacer más. Hay una ley de la naturaleza que insiste en que una persona lea estos misterios por sí misma (...) Todo el conjunto de 'Luz en el Sendero' [texto teosófico comunicado por un Adepto a Mabel Collins y que también se deriva en parte del Libro de los Preceptos Dorados] está escrito en código astral, y por lo tanto sólo puede ser develado por alguien capaz de leer astralmente".

En consecuencia, es relevante considerar esto con respecto al punto n°1 mencionado en el inicio de este artículo.

Se podría argumentar que a buen seguro los Mahatmas no habrían dictado o incluido en un cifrado astral ninguna inexactitud o citas erróneas, faltas de ortografía, etc., y que por lo tanto estos "deslices" pueden alterarse y actualizarse sin causar ningún problema. Posiblemente esto sea cierto, pero ¿por qué correr el riesgo y sólo para aplacar e impresionar a algunos académicos quienes realmente no sean propensos a dar la más mínima credibilidad a la Teosofia y simplemente porque el texto de un libro está "bien pulido"?

"Lo que se otorga en estos volúmenes se selecciona tanto a partir de enseñanzas orales como escritas. Esta primera entrega de las doctrinas esotéricas se basa en Estrofas que son registros de un pueblo desconocido para la etnología; se afirma que están escritas en una lengua ausente de la nomenclatura de idiomas y dialectos que conoce la filología; que emanan de una fuente (ocultismo) repudiada por la ciencia y, finalmente, se ofrecen a través de un intermediario incesantemente desacreditado ante el mundo por todos quienes odian las verdades desagradables, o tienen algún pasatiempo especial propio para defender. Por lo tanto, puede esperarse el rechazo de estas enseñanzas y deben ser aceptadas de antemano. A nadie que se haga llamar 'erudito' en ningún ámbito de ciencia exacta se le permitirá considerar estas instrucciones con seriedad".

"Una de las objeciones más grandes y serias a la corrección y confiabilidad de todo el trabajo serán las Estrofas preliminares: '¿Cómo pueden verificarse las declaraciones contenidas en ellas?' Es cierto, pero mientras una gran parte de las obras sánscritas, chinas y mongoles citadas en los volúmenes actuales son conocidas por algunos orientalistas, la obra principal -aquella de la que se presentan las Estrofas- no está en posesión de las bibliotecas europeas. El Libro de Dzyan (o 'Dzan') es totalmente desconocido para nuestros filólogos, o de todos modos nunca se supo de él bajo su nombre actual. Por supuesto, esto representa un gran inconveniente para quienes siguen los métodos de investigación prescritos por la ciencia oficial; pero para los estudiantes de Ocultismo y todos los ocultistas genuinos esto será de poca importancia" (H.P.B., "La Doctrina Secreta", vol. 1, Introducción, p. xxxvii, xxii-xxiii).

En un número de la revista "Theosophy" de la L.U.T. (julio de 1927) y como parte de una serie titulada "The Rising Cycle", los editores publicaron un comentario reciente en ese entonces por G.R.S. Mead, quien 34 años antes había trabajado con Annie Besant para producir la "Tercera Edición Revisada" de "La Doctrina Secreta" y donde luego se encontró que contenía alrededor de 40.000 alteraciones (la mayoría de ellas poco relevantes, pero algunas sí fueron muy notorias) respecto a la propia edición homónima de H.P.B. Asimismo, Mead declaró esto sobre William Judge:

“En el momento en que yo estaba revisando el texto impreso de los volúmenes I y II, W.Q.J. sostuvo con firmeza que la Doctrina Secreta en todas sus partes y en toda su dicción era trascendentalmente 'oculta' e inspirada de modo verbal por los Mahatmas, como él mismo me dijo cuando vio por primera vez el texto impreso y revisado. Pensé que estaba completamente equivocado y por eso se lo dije".

Mead tenía derecho a su opinión, pero era totalmente contrario a la postura de los mismos Mahatmas, y de todas las personas involucradas Ellos deberían haber conocido los hechos reales del asunto. Pero como el tiempo lo mostraría, Mead terminó por no creer en la existencia de estos Seres y adoptó una visión totalmente negativa y crítica de H.P.B., la Teosofía y el Movimiento. Su intelecto era admirable e impresionante, pero al considerar su vida parece ser que lo elevó a una posición suprema sobre todos los demás Principios de su constitución, incluidos los espirituales e intuitivos.

Es importante tener en cuenta que el teósofo holandés Henk Spierenburg (ya fallecido) descubrió y declaró de forma impresa que Boris de Zirkoff se apresuró demasiado en algunas de sus "correcciones" y apostillas sobre los escritos de H.P.B. en la serie "Collected Writings".

Un ejemplo no despreciable es el siguiente:

En "Isis Develada" (vol. 2, p. 286) Blavatsky hace una mención pasajera sobre "una sucesión de disciplinas a través de los refugios celestiales (llamados Zion por los budistas) (...) Es desde este Zion más elevado que descenderá a la Tierra Maitree-Buddha, el Salvador venidero”.

Zión es un término que en general se asocia únicamente con el judaísmo y el cristianismo, pero en lugar de considerar que esta referencia ciertamente confusa pudiera tener algo de legitimidad, en su edición de "Collected Writings" para "Isis Develada" Zirkoff agrega una nota a este pasaje diciendo que "hay cierta confusión en este punto del texto, y ninguna explicación parece posible con respecto al uso del término Zion en relación con el budismo".

Contrariamente y al compilar su libro "The Buddhism of H.P. Blavatsky", Spierenburg investigó este punto y descubrió que "Zian" (deletreado de manera algo distinta aunque fonéticamente igual en inglés) de hecho es un término usado en algunas enseñanzas budistas en este contexto, y que incluso H.P.B. no había sido la primera persona en escribirlo en idioma anglosajón.

Por desgracia, el propio Spierenburg no sólo atribuía erróneamente el "desliz" a H.P.B. sino también a T. Subba Row en sus libros compilatorios de estos autores, particularmente en relación con el uso de ciertos términos sánscritos y a cuyo respecto pareció haberse visto de modo descarriado como "experto".

En otra publicación (http://theos-talk.com/archives/199903/tt00026.html) las palabras de Tony Maddock fueron respondidas por Dallas Tenbroeck, un antiguo asociado de la L.U.T. en Los Ángeles ahora fallecido:

"Encuentro de vez en cuando (y me sacan de quicio) declaraciones de que H.P.B. escribía en el 'inglés del siglo XIX' o 'de tipo victoriano'. En realidad no significa NADA, sólo que los autoproclamados 'críticos' se dan a sí mismos una apariencia de conocimiento y sabiduría que les falta, y una de las carencias es la humildad (...) Es un Karma curioso observar a estudiantes que están bien calificados y ansiosos por aprender Teosofía que se apartan de este callejón sin salida del literalismo. Es muy fácil adoptar y temer el poder de los colegas en la academia, pero dejemos que sigan jugando pues, ¿quién se beneficiará más en el largo plazo? Incluso 'La Voz del Silencio' (...) habla del 'tonto altanero' alzado en aislamiento en una torre a la que subió y 'no la percibe nadie más que él mismo'. En realidad él puede hacer mucha publicidad con la esperanza de ser 'reconocido' y su 'experticia' atrae el respeto que tanto anhela, pero ¿ayuda esto a la humanidad en general o sólo le agrada a sí mismo?"

La última pregunta es pertinente, como escribió el Maestro M. a A.P. Sinnett a través de William Judge: "Esta es la era de la gente común, aunque puede que no estéis de acuerdo, pero así es" ("An Old Message from the Master", William Q. Judge Theosophical Articles, vol. 2, p. 309). También Judge repite en su artículo "The Closing Cycle":

En general las clases cultas no tienen ningún valor para los Maestros-constructores de la Logia. Son buenos en el lugar que tienen, pero representan el 'orden establecido' y el apogeo del egoísmo (...) No son las masas cultas, sino las ignorantes que han mantenido viva la creencia en lo oculto y lo psíquico ahora avivadas como fuego una vez más, pues si la hubiésemos confiado a lo cultos la pequeña brasa se habría extinguido hace mucho tiempo. Podemos incorporar a la clase docta, pero será sólo para que tenga un interés lánguido y poco entusiasta".

Además, en el artículo "Cautions in Paragraphs" aconseja: "Tengan cuidado con la proposición de que los ricos -o aquéllos en la vida social que necesitan la Teosofía tanto como los más humildes- deban hacer esfuerzos especiales por ellos mientras fracasan o se niegan a ayudar abiertamente a la Sociedad con su semblante y esfuerzo".

Por supuesto, esto no significa que debamos adoptar una actitud negativa hacia los académicos e intelectuales, pues ellos tienen su lugar y lo cual es bueno, valioso y necesario, pero no deberían convertirse en una de nuestras "prioridades principales" en el trabajo teosófico.

Un punto que a menudo fue repetido por personas como Judge y Robert Crosbie -fundador de la L.U.T.- fue: "La Teosofía es para aquéllos que la quieren", por cuanto las personas de cualquier clase, educación u oficio que en este mundo de sufrimiento y tristeza tienen hambre y sed de Verdad sobre realidades espirituales no pueden darse el lujo de estar preocupados por errores ortográficos o citas. Lo que les importa son las enseñanzas en sí mismas y la filosofía esotérica en su integridad, independiente del atuendo exterior.

La propia Blavatsky también habló críticamente de aquéllos que son "más cuidadosos para evitar errores de ortografía, que en prestar atención al significado secreto" de los textos y escritos esotéricos ("La Doctrina Secreta", vol. 1, p. 521).

Con respecto a la cuestión de si es necesario reescribir los libros para hacerlos más modernos, atractivos, populares y fácilmente comprensibles, se plantean tres aspectos principales además de los que ya hemos discutido:

(1) Si H.P. Blavatsky viviera en el mundo de hoy no sería una profesora espiritual o autora popular. Los que sí tienen esa categoría como Eckhart Tolle, Deepak Chopra y Rhonda Byrne son individuos cuyas proclamas y obras son casi totalmente inocuas, inofensivas y en gran parte evasivas sobre asuntos metafísicos sustanciosos. Por el contrario, los mensajes y escritos de H.P.B. son muy contundentes, agudos, desafiantes y a veces extremada y directamente críticos sobre los sistemas sociales, de creencias, las estructuras religiosas, etc., que inducen a error y obstaculizan a la raza humana. También ella proporciona respuestas y explicaciones sólidas, filosóficamente coherentes y detalladas sobre algunos de los temas más místicos e intrincados ya que la humanidad tiene una gran necesidad de ese conocimiento. Blavatsky rechazó el beneficio personal y la popularidad, pues estaba consciente que debía cumplir una misión específica y no estaba preparada para comprometerla de ninguna manera, independiente de a cuántos enemigos en posiciones elevadas podría involucrar o a cuánta calumnia, abuso y ridículo pudiera estar sometida. Es imposible imaginarla apareciendo en programas de televisión como el de Oprah Winfrey con objeto de aumentar las ventas de un nuevo libro. Esos "maestros espirituales" de hoy que recurren a esta estrategia no son necesariamente "malos", pero están en una categoría completamente diferente a la de Blavatsky y sería un grave error tratar de arrastrarla a su nivel al volver a escribir y revisar sus obras para hacerlas más "accesibles", pues la verdad completa y sin diluir nunca es popular, al menos en este Kali Yuga.

(2) Respecto a la forma o el método en que se escribe "La Doctrina Secreta" que algunos describen como "demasiado complejo" o "innecesariamente complicado", B.P. Wadia escribió: "El objetivo a la vista es provocar el pensamiento. Nadie podría traducir el denso contenido de los dos volúmenes a un lenguaje que la persona común pueda captar sin esfuerzo. Es necesario señalar esto debido a las críticas que han llegado a nuestro conocimiento (...) Y eso nos lleva a su método de impartir la enseñanza (...) Como esoterista entrenada por otros ocultistas, su forma de instruir está estrechamente relacionada con la manera en y por la cual ella misma aprendió. Debe ponerse en actividad la capa más profunda de la mente humana si se desea comprender La Doctrina Secreta en un grado apreciable" ("Studies in The Secret Doctrine", p. 112, 15). Y también en el prefacio de "La Clave de la Teosofía", su libro más simple y claramente explicado, la propia H.P.B. recalca: “Sería demasiado esperar que esta obra tuviera éxito en hacer inteligible la Teosofía sin esfuerzo mental por parte del lector, pero deseamos que la oscuridad que aún queda sea del pensamiento y no del lenguaje, y se deba a la profundidad, no a la confusión. Para los mentalmente perezosos u obtusos la Teosofía debe seguir siendo un enigma, porque tanto en el mundo mental como espiritual cada individuo debe progresar por su propio esfuerzo. La escritora no puede hacer que el lector piense por él, ni este último estaría mejor si ese pensamiento vicario fuera posible".

(3) Hay personas en las naciones del "tercer mundo" -y para quienes el inglés no es su primera ni segunda lengua- que leen, estudian y comprenden activamente las enseñanzas de Teosofía, incluidas las de "La Doctrina Secreta". El punto aquí es que cualquiera que realmente quiere aprender y comprender la Doctrina podrá hacerlo, porque ese anhelo lo motivará a realizar el grado de esfuerzo requerido. A menudo, quienes reclaman aspectos como el n° 1 (al comienzo de este artículo) son teósofos que no están dispuestos a hacer una tentativa real en sus estudios, y que por lo tanto desarrollan una especie de resentimiento hacia H.P.B. por no hacer que "todo sea simple y fácil de entender"

Decimos "a menudo" porque no siempre éste es el caso. Por ejemplo, el teósofo inglés Harvey Tordoff estudió "La Doctrina Secreta" hasta el punto de producir una versión "modernizada" y "simplificada" de las Estrofas de Dzyan y pasajes relacionados con aquella extensa obra.

Su libro "¡O Lanoo!" que contiene dichos extractos fue publicado hace unos años y, por lo que sabemos es el primer y único intento hasta ahora de reescribir los textos de Blavatsky para "adaptarlos" a la "mente del siglo XXI".

No es malo si el libro en cuestión populariza las enseñanzas y pone a más personas en contacto con ellas, pero desafortunadamente Tordoff también dice con insistencia a sus lectores que las versiones de H.P.B. para estos textos son "impenetrables", una afirmación engañosa que inevitablemente provoca que muchos no traten de abordar las enseñanzas en la forma que los Maestros la dieron y también eleva a Tordoff a la posición de "intermediario" e "intérprete" entre Blavatsky y las masas.

Estamos seguros de que Robert Crosbie no habría apreciado mucho el trabajo de Tordoff, pues en su artículo "The Position Assumed" declara:

Si los estudiantes van a recibir los beneficios de la enseñanza y el ejemplo de los Maestros, y si desean aprovechar el trabajo de H.P.B. y W.Q.J., deben regresar a la Fuente, estudiar y pensar; deben despejar de sus mentes la basura de las pretensiones de líderes y autodenominados exponentes. Tienen que dejar de recurrir al intérprete y es menester que se informen de primera mano”.

La tarea de presentar al público general las enseñanzas teosóficas de la manera más clara y comprensible que se pueda es tarea de todas las logias y grupos homólogos, especialmente en sus charlas, conferencias y trabajo en línea. Los centros mundiales de la Logia Unida de Teósofos están dedicados a "la difusión de los Principios Fundamentales de la Filosofía Teosófica y la ejemplificación práctica de esos postulados", como expresa el manifiesto de la Logia y los sitios en internet como éste.

Estas iniciativas imparten principios teosóficos a todo tipo de personas, muchas de los cuales probablemente nunca estudiarán libros teosóficos por sí mismas, pero aún pueden beneficiarse muchísimo de lo poco que pueden escuchar o leer. Pero para los que desean profundizar y enfrentarse realmente con la Teosofía es inevitable y medular llevar a cabo un estudio individual de todos los escritos legados al mundo por H.P. Blavatsky y W.Q. Judge, y la única forma totalmente confiable de hacerlo es con los originales inalterados que por fortuna se han mantenido impresos y disponibles por la L.U.T. y su división de Theosophy Company.

En el mismo artículo de la serie "The Rising Cycle" leemos:

“Después de declararse culpable por la ofensa real de alterar en muchos miles de casos el texto de los escritos por H.P.B., de hacerlo tras su muerte ocultando por silencio y tergiversación su crimen literario, y luego de hacer su aserto de evasión cuando muy literalmente 'revivieron el libro', Mead intenta psicologizar a sus lectores para que crean que H.P.B. le otorgó autoridad póstuma para corromper su trabajo de vida.

'Hablando en general y en cualquier caso, debo decir que la propia Blavatsky ahora sería la primera en agradecerme por los dolores que asumí al revisar lo no esencial de su Doctrina Secreta'.

¿Por qué no? Si Mead se sentía autorizado a tomar palabras de Blavatsky como hizo, ¿por qué no debería poner también afirmaciones en su boca tal como ahora? En otras palabras, no se debe confiar en H.P.B. hasta que Mead haya 'editado' e interpretado lo que ella escribió; la Helena Blavatsky a quien él acusa de falsedades categóricas y repetidas, y finalmente con su propia ofensa de 'forzar' los hechos para que se ajusten a las necesidades del caso que nos compete".

Por desgracia, esto también se aplica a mucho del trabajo por Boris de Zirkoff en los "Collected Writings" que se publican bajo los auspicios de la Sociedad Teosófica Adyar, bien conocida por su actitud más que irrespetuosa hacia H.P.B.

Esta es una de las varias razones por las cuales la L.U.T. generalmente no usa en su trabajo la serie "Collected Writings" (aparte de tener algunos de los volúmenes en ciertas bibliotecas de la Logia) y en cambio tiene lo que en la práctica es su propio equivalente, es decir, los "H.P. Blavatsky Theosophical Articles” y otros libros como “Theosophy: Some Rare Perspectives”, “A Modern Panarion”, “Five Years of Theosophy” y “The Theosophical Articles and Notes”. Y para responder la pregunta de si "las obras de Blavatsky necesitan reescritura", sostenemos que no, pero sí necesitan estudiarse y aplicarse en la mayor medida posible de forma práctica y usando mente y corazón.